sábado, 11 de marzo de 2023

El razonamiento clínico en fisioterapia

El razonamiento clínico me permite ver cual es el origen de los problemas de mi paciente.

El razonamiento clínico me impide ver cual es el origen de los problemas de la fisioterapia.

El razonamiento clínico me permite comprender el método científico y aplicarlo.

El razonamiento clínico me impide ver que te estoy explotando laboralmente.

El razonamiento clínico me permite comprender la situación de dependencia de un paciente

El razonamiento clínico me impide comprender una situación laboral injusta de fisioterapia.

El razonamiento clínico me permite publicar comprender artículos científicos de fisioterapia en inglés.

El razonamiento clínico me impide comprender una ley redactada en español donde me la están colando con la privatización de la atención temprana.

El razonamiento clínico me permite reclamar más pago por cada paciente para que las sociedades médicas no me den solo 5 € por sesión.

El razonamiento clínico me impide repercutir ese pago en mi trabajador, que seguirá cobrando lo mismo, por supuesto.

El razonamiento clínico me permite comprobar que éramos compañeros de aula en la universidad.

El razonamiento clínico me impide ver que ahora te estoy explotando.

El razonamiento clínico me permite idea estrategias de marketing para hacer crecer mi clínica y mis pacientes.

El razonamiento clínico me impide ver que tener a fisioterapeutas compañeros como falsos autónomos es un fraude de ley absoluto.

El razonamiento clínico me permite sacar adelante un caso clínico difícil.

El razonamiento clínico me impide ver que estoy prolongando el número de sesiones indefinidamente para seguir sacando más dinero.

El razonamiento clínico me permite sacar mi grado de fisioterapia.

El razonamiento clínico me impide leer y comprender mis derechos en un simple convenio laboral.

El razonamiento clínico me permite debatir y cuestionar con o sin argumentos, para defender mis creencias ante amigos que nos quieren hacer entender que la pseudociencia no es el camino.

El razonamiento clínico me impide debatir y cuestionar a los gurús que me venden cursos de pseudociencias en fisioterapia.

El razonamiento clínico me permite establecer un plan de actuación razonado sobre mis pacientes.

El razonamiento clínico me impide establecer un plan de actuación razonado sobre mis trabajadores.

El razonamiento clínico me permite hacer muchos cursos para aprender más y tener más herramientas de pensamiento.

El razonamiento clínico me impide ver la poca utilidad que pueden tener la mayoría de los cursitos.


El razonamiento clínico me permite comprender los principios tan cogidos con pinzas en los que se basa una determinada técnica de fisioterapia.

El razonamiento clínico me impide comprender los principios básicos de la física, la biología, o la medicina que tiran por tierra lo absurdo de esa técnica.

El razonamiento clínico me permite sacarme 5 años de osteopatia, incluso que me den un título de homologación rara como el DO. Osteopatía.

El razonamiento clínico me impide ver como la osteopatía parasita a la fisioterapia y la hace daño.

El razonamiento clínico me permite sacar mil conclusiones de una investigación.

El razonamiento clínico me impide contra-argumentar esas mismas conclusiones porque no me conviene que se sepa.

El razonamiento clínico me permite publicar muchísimos artículos cada año y figurar en todos ellos para conseguir ser catedrático pronto.

El razonamiento clínico me impide ver que estoy explotando a inocentes alumnos de máster y haciéndoles firmar documentos anti éticos donde deben incluirme obligatoriamente en sus publicaciones, pese a que yo soy solo el profesor y paso de ellos bastante (todo sea dicho).

El razonamiento clínico me permite redactar un código deontológico de fisioterapia con unos sólidos principios éticos, e incluso comprenderlo.

El razonamiento clínico me permite saltarme el propio código deontológico si no me conviene en alguna de mis prácticas clínicas.

El razonamiento clínico me permite ser una persona con mucho conocimiento de fisioterapia.

El razonamiento clínico me impide no ser un verdadero gilipollas como persona y especialmente con mis alumnos.

El razonamiento clínico me permite ser profesor universitario sin tener capacidad para transmitir conocimientos.

El razonamiento clínico me impide ver que en las universidades privadas quien paga manda, a la hora de aprobar. 

El razonamiento cínico me permite sacarme del tirón el grado, el posgrado y el doctorado sin tocar un paciente.

El razonamiento clínico me impide ver lo absurdo, controvertido y  anti-ético que supone ser profesor de una carrera, fundamentalmente clínica, sin haber tocado un sólo paciente en mi vida.

El razonamiento clínico me permite ver que la fisioterapia es una profesión fascinante y de un superchachiguay futuro.

El razonamiento clínico me impide ver que con 1000€ no se puede vivir.

El razonamiento clínico me permite hacer grandes hilos en twitter, grandes infografías, grandes publicaciones curradas de Instagram super fisioterapéuticas.

El razonamiento clínico me impide ver que sigo sin un trabajo digno mientras publico cosas que no tienen un valor útil

El razonamiento clínico me permite ser un influencer de la fisioterapia y hasta tener mi canal de youtube y "mi proyecto"

El razonamiento clínico me impide ver que mi día a día laboral es gris y anodino, que siempre tengo los mismos pacientes y que no hay nada que lo vaya a cambiar ni a hacer evolucionar.

El razonamiento clínico me permite leer un artículo científico y explicarlo en alguna red social con dibujos muy bonitos.

El razonamiento clínico me impide comprender o publicar otros artículos si no me convienen con lo que yo pienso.

El razonamiento clínico me permite juntar a muchos fisioterapeutas en una manifestación y reivindicar cosas.

El razonamiento clínico me impide dejar de lado mi pensamiento político y comprender donde están los responsables de la gestión del dinero que afecta directamente a la fisioterapia.

El razonamiento clínico me permite criticar e ir a por los responsables de los colegios de fisioterapia que no hacen nada por la profesión, se llevan nuestro dinero y encima son cómplices de la situación.

El razonamiento clínico me impide esforzarme el día de ir a votar para poder echar a esos mismos que critico.

El razonamiento clínico me permite razonar clínicamente sobre cualquier cosa, aunque no sea fisioterapia, y ser un martillo pilón contra las pseudociencias.

El razonamiento clínico me impide manifestarme contra las injusticias internas y profesionales de la fisioterapia, aunque las comprenda perfectamente, porque soy el dueño de una clínica.

El razonamiento clínico me permite comprobar como se le ha dado la vuelta al propio concepto de razonamiento clínico en esta entrada.

El razonamiento clínico me impide ver como yo mismo le doy yo la vuelta al propio razonamiento clínico cuando me conviene manipular algo.

El razonamiento clínico me permite hablar con raciocinio sobre el razonamiento clínico.

El razonamiento clínico me impide hacerlo sobre todo aquello que no me conviene.

5 comentarios:

  1. Muy buen artículo divulgativo sobre el tan importante razonamiento clínico en el mundo de la fisioterapia! En nuestra clínica en Granada (Davinci) también lo aplicamos.

    http://carmenrojasfisioterapia.es/

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  2. Te felicito por este artículo, es realmente gratificante para todos aquellos que nos dedicamos a esta profesión tan dura. ¡Enhorabuena!

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  3. Enhorabuena por tu labor, muchas personas te tacharán de pesimista pero a mi parecer después de unos cuantos años ejerciendo la profesión y viendo cómo se va desarrollando a lo largo del tiempo percibo que tus impresiones son críticas y realistas. Estudiar fisioterapia hoy en día no es una buena opción, menos para una persona que se esfuerza en estudiar y aspira a tener una buena calidad de vida. El nivel de exigencia y sacrificio que te exige ya no solo entrar y sacar la carrera sino después alcanzar un puesto laboral retribuído acorde a la formación y al esfuerzo físico no merece la pena en absoluto...mires por donde lo mires. Hasta los autónomos que abren la clínica a los años las acaban traspasando, aunque tengan una buena agenda los pacientes pagan mal, no está valorada y acaba siendo un trabajo que no te da calidad de vida (mal sueldo, poco tiempo libre para conciliar y machaque físico-psíquico). Hoy en día muchísimas profesiones están mejor valoradas que la fisioterapia, como la enfermería, magisterio, informática, incluso haciendo FP...cobrarás igual o más que un fisioterapeuta. Y las oposiciones ya no son como antes, ahora te piden un nivel parejo al que piden a un médico en conocimientos para luego aplicar un 20% en el trabajo. Y al final el sueldo comparado con el de otros profesionales como TCAES en hospital (que hacen turnos) es bastante similar....lo dicho...a los futuros estudiantes si leen esto y tienen dudas, fisioterapia hoy por hoy no es una buena opción como medio de vida. Escribo esto porque a mí me hubiera gustado mucho leer estas opiniones y no haber perdido tanto tiempo y esfuerzo en algo que no merece la pena. Saludos.

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